jueves, 12 de septiembre de 2013

Creando historias





Había una vez un señor llamado Ernesto Mufin.
Este señor vivía en la playa y su profesión era esculpir.
Luego de muchos años llego a la universidad de esculturas
de los Estados Unidos.Después de haberse recibido como
escultor profesional dos años más tarde abrió su tienda de esculturas
en New York y la llamo en honor a las Torres Gemelas, "World Trade Center" .
Luego de haberse echo conocido en el país se mudo, abrió muchas más propiedades y
recorrió otros países como: Argentina, Italia, México, España, etc.
Luego de recorrer el mundo se hizo famoso por muchos países.Diez años más tarde en Rusia padeció de una enfermedad llamada Leucemia. Sus hermanos con el dinero que recaudo Ernesto de su gira, pagaron los tratamientos más costosos que había y que hay, pero con esa enfermedad no había tratamiento que valga.
Después de años y años sufriendo esta terrible enfermedad le llego un pedido de escultura de un fanático, pidiéndole un ángel para regalar. Ernesto con sus últimos alientos hizo la escultura y se la envió a este joven fanático como solía hacer con sus clientes. Cuando envió el pedido para la casa del cliente se fue a descansar a la cama y al otro día se levanto, se cambio y fue como casi siempre a la misa de los domingos a la iglesia de la vuelta de su casa. Cuando volvió, encontró un paquete grande en la puerta de su casa.Cuando abrió el paquete, sorprendido vio la escultura que el había echo el día anterior, ese paquete tenia un nota y decía así : " Hola Ernesto, soy su fanático numero uno y realmente cuando me entere de esa terrible enfermedad me puse muy triste ya que sos mi ídolo y un ejemplo a seguir para mi, te quiero mandar de regalo esto, y pedirle a dios que te de un milagro y que sigas con nosotros" . Luego de que Ernesto vio esa nota se le caían las lagrimas de los ojos, claro, entro el paquete, y de la nada se largo a llover